Desde Cuídemi queremos rendir homenaje a los abuelos y abuelas, nuestros segundos padres y madres, en este día tan señalado en el calendario, el 26 de julio.
La figura de los abuelos ha cambiado mucho con el paso de los años y ese salto generacional es evidente. Ahora disfrutan más tiempo de su orgulloso papel, de ese amor incondicional y de la responsabilidad de convertirse nuevamente en padres y madres, siendo un referente muy cercano e importante en los cuidados, la crianza y la educación de los nietos.
Los abuelos de hoy se sienten más jóvenes y disfrutan de una mayor calidad de vida, tienen acceso a mejores servicios y cuidados asistenciales y presumen de contar con una actitud más vitalista y optimista a la hora de hacer frente a la situación que estamos viviendo. Ellos nos han enseñado a no perder la esperanza, a estar unidos y a avanzar, y en definitiva a dar valor a lo importante de la vida.
Han sabido adaptarse a los nuevos tiempos incorporando la tecnología a su cotidianidad, haciendo uso de nuevos canales para mantener una comunicación más fluida y constante con sus familias, sin importar las limitaciones físicas o geográficas. Poco a poco van retomando sus relaciones sociales y, después de algunos meses separados de su entorno familiar, vuelven a ser un gran apoyo emocional y alegría, especialmente para sus nietos.
De ellos decimos que son menos exigentes que sus hijos y que suelen desempeñar un papel de mediadores y conciliadores hacia sus nietos, cuyo vínculo suele ser muy estrecho, cercano y enriquecedor para ambas partes. Con ellos comparten no solo ratos de ocio y aficiones, más que con sus propios hijos, sino que también disfrutan de mucho más tiempo de acompañamiento, atención y largas estancias cuando los padres no pueden conciliar con su actividad diaria.
Sin duda, los abuelos son un referente imprescindible para las familias españolas, y gracias a su experiencia, cariño, paciencia y buenos consejos nos guían a la hora de educar y cuidar de nuestros hijos.
A todos ellos, incluso a los que se fueron antes de tiempo, les debemos mucho y les tenemos que estar muy agradecidos por transmitirnos su valentía, compromiso y amor, por estar siempre ahí y ser como son, para seguir cuidando de ellos como se merecen y rendirles este homenaje no solo hoy sino todos los días.
El tributo a la canción de Taylor Swift, Shake It Off, a cargo de cincuenta residentes de la Residencia Julia Wallace en Nueva Zelanda, sus nietos y el staff del centro, nos parecía el cierre más indicado por su alta dosis de ritmo, vitalidad y optimismo. ¿Acaso la edad importa?
¡Feliz Día, abuelos y abuelas!